A veces sucede
que la vida te da una foto de carnet
y te dice: deja de pensar tanto, este eres tú.
De repente te ves haciendo todo aquello
que te llena el alma
desde el ombligo hasta los hombros.
Y si además se cruza en tu vida esa mujer
que puede que sí o puede que no,
ya dure la historia una noche, un milenio o una canción
entonces, solo entonces
bien vale la gota de sangre
puesta en cada verso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario