Cada vez veo menos libros en el metro
como si ellos mismos hubiesen decidido
renunciar a lo profundo de los túneles
seguro que es por eso
los libros son refugios de luz
prefieren los espacios abiertos
de las estanterías soleadas
las manos del que pasea entre los árboles
o incluso el rotulador de un niño,
hasta eso prefieren
que viajar en los vagones de metro.
Prefiero imaginar esto, dejarme a solas con mi realidad.
Ahora la realidad viaja en forma electrónica, es lo que prefiero imaginar yo. De todos modos, la ausencia de lectores se compensa con la proliferación desmedida de presuntos escritores.
ResponderEliminarAbrazos, siempre